Recomendaciones para viajar con mascotas

Si estás pensando en salir de viaje y vas a llevar a tu mascota, la planificación es fundamental para que la experiencia sea positiva para los dos y evitar cualquier tipo de sobresaltos. Más allá de confirmar que el alojamiento y el destino elegidos son apropiados para él, también tenés que considerar el trayecto.

Preparación previa

El primer paso es visitar a tu veterinario para que confirme que el animal está en buenas condiciones de salud para viajar. De acuerdo al tiempo de viaje y a las características de la mascota, puede implicar cierto nivel de estrés y es importante que esté preparado para afrontarlo. 

Igual que los humanos, los animales cuando viajan en auto deben contar con un sistema de retención para su seguridad y la de los demás. La Agencia Nacional de Seguridad Vial aconseja llevar a las mascotas sujetas con arneses, en jaulas o caniles y en el asiento trasero, para que no molesten al conductor y no sean un elemento de peligro en el interior del auto. 

De acuerdo al tamaño de la mascota, hay distintas opciones. Un canil instalado en el piso del asiento trasero es lo ideal para un animal pequeño, uno más grande puede requerir viajar en el baúl siempre que pueda instalarse una reja divisoria y estén en contacto con la parte delantera del vehículo. Además, existen distintos arneses que pueden instalarse para que la mascota viaje retenida por el cinturón de seguridad. 

Durante el viaje

Una recomendación importante es que la mascota no haya comido nada al menos en las dos horas previas al viaje para reducir las probabilidades de mareo y vómito, lo que generaría una situación incómoda tanto para el animal como para el resto de las personas que viajen. 

Es importante llevar agua fresca y un recipiente  para que la mascota pueda tomar durante el viaje y mantenerse hidratada, en especial durante el verano. También la ventilación es clave, las temperaturas altas pueden afectar a la mascota, aunque debe evitarse en todo momento que se asome por la ventanilla. Para esto, el aire debe renovarse periódicamente. 

Otra condición que la puede afectar es el movimiento, por esto es recomendable que el tránsito sea lo más tranquilo posible, evitando las maniobras bruscas que van a hacer que el animal se ponga nervioso y que lo pase peor durante el viaje. 

Tampoco es una buena idea que el volumen de la música sea muy alto. Si es posible, hacer que el sonido se emita sólo desde los parlantes delanteros.

Un plan recomendable es programar paradas cada no más de dos horas para que tanto la mascota como el conductor estiren las piernas y descansen un rato. Al frenar, es importante asegurarse de que la mascota no esté suelta, podría salir corriendo y cerca de una ruta eso es especialmente riesgoso.

Una vez que se llega a destino, entre las primeras cosas que se hagan debería estar alimentar a la mascota.

Seguir estos consejos va a hacer que el viaje con tu mascota sea placentero. Por si surge algún inconveniente, es clave que cuentes con un seguro para tu auto que aporte confianza y tranquilidad, conseguilo de la manera más simple y asesorado por profesionales con más de veinticinco años de experiencia en el mercado.