3 claves al hacer la revisión técnica obligatoria
Al igual que la pericia y las condiciones psicofísicas del conductor, el estado mecánico de un vehículo es un factor clave para minimizar el riesgo de accidentes al circular en la vía pública. Y esto es especialmente importante cuando éste es usado para el transporte de pasajeros o de carga, la atención de emergencias o la asistencia en tareas de construcción, por dar algunos ejemplos.
Es precisamente por esto, que la ley de tránsito en Argentina establece la obligatoriedad de que todos los vehículos de las categorías L, M, N y O, realicen de forma periódica la llamada revisión técnica obligatoria (RTO).
Seguí leyendo, y aprendé más sobre la RTO del coche:
¿Cuándo se realiza la revisión técnica obligatoria?
Para los vehículos de uso particular, la ley establece la obligatoriedad de realizar la primera revisión técnica a partir de los 3 años desde la fecha de patentamiento original.
Cumplido ese plazo, la RTO debe renovarse inicialmente cada dos años, pasando a ser anual, cuando el vehículo cumple 7 años de antigüedad.
En todos estos casos, los conductores tienen 30 días antes del vencimiento, para realizar la revisión técnica obligatoria. Cumplido este plazo, no existe un período de gracia y el vehículo ya no puede circular en la vía pública. De hacerlo, podría ser retenida la licencia de conducir.
¿Qué se controla durante la revisión técnica obligatoria?
En el caso de los coches, los expertos mecánicos realizan una evaluación en profundidad de los siguientes aspectos de cada vehículo:
– Chasis.
– Dirección y tren delantero.
– Estado general.
– Emisión de ruidos y gases contaminantes.
– Chapa patente.
¿Cuáles son los posibles resultados?
La RTO puede arrojar tres posibles resultados: apto, no apto y condicional.
En el primer caso, se trata de vehículos que no poseen desperfectos (a lo sumo observaciones), por lo que se otorga un certificado de revisión y un informe técnico. Además, se coloca en el parabrisas, una oblea en la que figura el mes y año en que debe realizarse la siguiente revisión.
En cambio, si el estado del vehículo es condicional, significa que se han detectado desperfectos leves que deberán ser resueltos en el plazo de 60 días. Durante ese período, es posible seguir circulando con el coche, aunque será necesario regresar al taller para verificar que el inconveniente ha sido solucionado.
Finalmente, los vehículos no aptos, no están en condiciones de circular, en tanto no se hayan hecho las reparaciones pertinentes.
Como ves, cumplir con la RTO es un paso fundamental para reducir los riesgos mecánicos al conducir. Como ésta, contar con el respaldo de una cobertura de seguro confiable es esencial en caso de accidente. Conseguila de manera simple, aquí.
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